
La Influencia del Género del CEO en la Responsabilidad Social Corporativa
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abril 8, 2025La industria de la construcción en América Latina ha sido históricamente dominada por hombres, con una representación femenina significativamente baja. Esta disparidad se atribuye en gran medida a los roles de género tradicionales que han asignado a las mujeres responsabilidades domésticas y de cuidado, limitando su participación en actividades laborales remuneradas y, más específicamente, en sectores como la construcción y el uso de herramientas manuales y eléctricas. (United Nations, 2024).
Desde las primeras sociedades agrícolas, se asignaron roles de género en función de la fuerza física. Aunque hay evidencia de mujeres cazadoras en comunidades prehistóricas (Geller, 2009), la narrativa dominante colocó a los hombres en los trabajos pesados y a las mujeres en tareas domésticas. Con la llegada de los gremios medievales y el desarrollo de los oficios, las mujeres quedaron excluidas formalmente de la carpintería, herrería y albañilería (Wiesner-Hanks, 2015). Durante la Revolución Industrial, si bien las mujeres ingresaron al mercado laboral, lo hicieron en fábricas donde realizaban tareas consideradas “ligeras” y de menor paga, mientras los trabajos relacionados con herramientas permanecieron en manos masculinas (Tilly & Scott, 1978). Incluso en el siglo XX, muchas escuelas técnicas y de oficios estaban restringidas a hombres, mientras que a las mujeres se les enseñaba costura y cocina, reforzando así una segregación educativa (Stromquist, 2006).
Socialización y educación diferencial
Los estereotipos de género se perpetúan desde la infancia. En muchas familias, los niños crecen viendo a sus padres usar herramientas, mientras que las niñas no reciben la misma educación práctica (Faulkner, 2001). Estudios sobre juguetes infantiles evidencian que desde pequeñas se les incentiva a jugar con muñecas y cocinas, mientras que los niños reciben sets de herramientas y construcción (Fine, 2010). Esta socialización temprana condiciona las aspiraciones y habilidades técnicas de cada género, limitando la confianza de las mujeres en sus capacidades para participar en oficios tradicionalmente masculinos.
Condiciones actuales en la construcción
Aunque cada vez hay más mujeres en la carpintería y la albañilería, la representación sigue siendo mínima. En México, solo el 2% de los empleos en el sector de la construcción son ocupados por mujeres (INEGI, 2020). Además, enfrentan una fuerte brecha salarial: las mujeres en estos sectores ganan, en promedio, un 30% menos que los hombres (OIT, 2021).
A pesar de estas barreras, diversas iniciativas en la región buscan promover la inclusión de mujeres en la construcción. Por poner algunos ejemplos; en Jalisco, la escuela itinerante de construcción con tierra para mujeres promueve que sus saberes se plasmen y reproduzcan con el fin de fortalecer su autonomía para decidir sobre sus cuerpos y la defensa de la tierra y sus territorios. Y en la CDMX, Handy Woman refuerza la confianza de las mujeres a través de talleres de mecánica, soldadura, carpintería, entre otros.
La incorporación de mujeres en estos sectores no solo promueve la equidad de género, sino que también aporta beneficios económicos, sociales y ambientales. La diversidad de género en equipos de trabajo mejora la productividad, la innovación y la toma de decisiones (United Nations, 2024). Además, las mujeres aportan perspectivas únicas sobre el diseño y uso de espacios, contribuyendo a proyectos más sostenibles e inclusivos (Peru Green Building Council, 2023).
Taller de uso de herramientas dirigido a mujeres
Ante este panorama histórico y estructural de desigualdad, desde el proyecto Promoción de Vivienda Sana y Segura bajo perspectiva de género en Mesoamérica surgió la inquietud de crear espacios que no solo capaciten técnicamente a las mujeres, sino que cuestionen y transformen estos roles de género que históricamente les han impedido apropiarse del uso de herramientas. Este proyecto se llevó a cabo gracias al financiamiento de la Agencia Francesa de Desarrollo y Misereor, y la colaboración en el codiseño y ejecución de Espacio Odisea, Colectiva Meztli y Grupo Hnos. Flores.
Como parte del proceso, diseñamos una encuesta que fue respondida por alrededor de 100 mujeres de la comunidad UMA y de Valle de Bravo —en su mayoría trabajadoras y emprendedoras—, en la que identificamos que las principales razones por las que no usan herramientas son el miedo, la sensación de no ser capaces, la falta de conocimiento técnico y la percepción de no tener suficiente fuerza.
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Taller de herramientas en Espacio Odisea. Foto: Lavinia Negrete.
Con estos insumos, y a través del modelo de valor de Cynthia Jaramillo (estudiante de la Maestría en Innovación Educativa para la Sostenibilidad en la UMA), definimos el diseño del taller, su duración, y el tipo de herramientas que aprenderíamos a usar, buscando responder directamente a estas barreras sentidas. El día del taller comenzamos con un espacio de reflexión sobre los roles de género y las narrativas que nos han hecho sentir que las herramientas “no son para nosotras”.
Posteriormente se abordaron temas de seguridad, se presentó el uso básico de las herramientas manuales y eléctricas como sierra de inglete, taladro, prensas para carpintería, serruchos, entre otros. Se creó un ambiente de confianza para experimentar. La construcción colectiva de un zapatero-especiero fue solo el pretexto: lo importante fue ver cómo, poco a poco, las participantes pasaban del miedo a la destreza, de la duda a la autonomía. Al final del día, las herramientas ya no parecían ajenas, sino aliadas.
Conclusiones
La superación de las barreras de género en la construcción en América Latina requiere un enfoque integral que contemple transformaciones culturales, educativas y laborales. Las mujeres tienen el potencial, la capacidad y la motivación para participar activamente en este sector. Las iniciativas existentes demuestran que cuando se les brinda formación, oportunidades y entornos libres de discriminación, las mujeres no solo usan herramientas: construyen caminos hacia una sociedad más equitativa.

Taller de herramientas en Espacio Odisea. Foto: Lavinia Negrete
Referencias
Autodesk. (2020). 4 mujeres trabajando en la construcción en Latinoamérica. Autodesk. https://www.autodesk.com/es/design-make/articles/women-working-in-construction
Construye 2025. (2023). Iniciativas que impulsan la participación de la mujer en la construcción. https://construye2025.cl/2023/07/28/iniciativas-que-impulsan-la-participacion-de-la-mujer-en-la-construccion/
El País. (2025). Tejedoras de ilusión. https://elpais.com/chile/2025-03-25/tejedoras-de-ilusion.html
Faulkner, W. (2001). The technology question in feminism: A view from feminist technology studies. Women’s Studies International Forum, 24(1), 79-95.
Fine, C. (2010). Delusions of gender: How our minds, society, and neurosexism create difference. W.W. Norton & Company.
Geller, P. L. (2009). Identity and difference: Complicating gender in archaeology. Annual Review of Anthropology, 38, 65–81.
INEGI. (2020). Mujeres en la industria de la construcción. Instituto Nacional de Estadística y Geografía. https://www.inegi.org.mx
Peru Green Building Council. (2023). El rol de las mujeres para alcanzar la igualdad de género en la construcción sostenible. https://proyectoceela.com/2023/05/19/el-rol-de-las-mujeres-para-alcanzar-la-igualdad-de-genero-en-el-sector-de-la-construccion-sostenible/
Stromquist, N. P. (2006). Gender, education and the state: Theories and politics of education. Routledge.
Tilly, L. A., & Scott, J. W. (1978). Women, work, and family. Holt, Rinehart and Winston.
United Nations. (2024). El enfoque de género en las infraestructuras públicas. ONU Mujeres. https://lac.unwomen.org
Wiesner-Hanks, M. E. (2015). A concise history of the world. Cambridge University Press.
Escrito por Daniela Meléndez García (estudiante de la Maestría en Arquitectura, Diseño y Construcción Sostenible, generación 2024)
Las opiniones incluidas en este artículo son responsabilidad de quien las escribe, y no reflejan la postura, visión o posición de la Universidad del Medio Ambiente.