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agosto 29, 2019Un baño seco vivo es un sistema de baño ecológico que no utiliza agua, sino que transforma todos los residuos orgánicos de nuestro baño en tierra. Utilizando los microorganismos que se encuentran en nuestra materia orgánica y reciclando hojas secas, puedo crear un sistema que genera calor (por eso es una composta termófila) y así transformar mis residuos de forma sanitaria y eficiente. Un proceso de compostaje muy sencillo.
Una herramienta para cuidar el medio ambiente
Toda la riqueza nutricional de mi plato puede ser re-aprovechada mediante un sistema de baño seco vivo. Por eso es una herramienta fantástica para cerrar nuestro ciclo de nutrientes a una escala individual o familiar. De esta manera dejamos de contaminar el agua generando un recurso o la materia prima para mantener la fertilidad de nuestra tierra.
El sistema de baño seco vivo que conocerás en el taller consta de un cajón tipo taza de baño. Ahí se colecta toda la materia orgánica cuando lo usamos, igual que el baño normal. En esta taza colectora empezamos a realizar el proceso de compostaje: mezclamos siempre materia orgánica seca, misma que asegura las condiciones para que los microorganismos que nos ayudarán en el proceso se conserven y se activen.
La segunda parte del sistema es un espacio para compostar de 1-1.5m3 con el que vamos a mantener el proceso de transformación que empezamos en el baño. Utilizamos mayor espacio para propiciar el desarrollo de las comunidades microbianas que elevarán la temperatura y llevarán a cabo el proceso hasta obtener tierra, abono o mejor dicho “humabono”.[1]
Es evidente el uso del baño seco como una herramienta para maximizar el uso del agua potable. Sin embargo, el impacto de esta herramienta en la regeneración y conservación de la fertilidad y nutrición de la tierra es un tema poco discutido. Esto porque el sistema requiere un manejo y un correcto desarrollo del mismo. No obstante, a nivel familiar permite administrar al 100% los residuos orgánicos que se generan en la casa. Aprovecharlos en cualquier jardín, árbol o huerto familiar, cerrar el ciclo de los nutrientes y hacer posible la autosuficiencia alimentaria.
Impacto y potencial de usarlo
El potencial del uso del baño seco vivo en comunidades urbanas y rurales puede fomentar el desarrollo de la fertilidad de las áreas verdes, cuya pérdida en muchos casos es el detonante del abandono, deterioro y remate de tierras.
Además es una herramienta de auto-responsabilidad, fuera de las necesidades de infraestructuras gubernamentales o institucionales. De esta manera tiene un gran impacto en la autogestión y empoderamiento civil.
El baño seco vivo es una mirada rápida a un proceso maravilloso de la naturaleza: la descomposición y el reciclaje de la materia orgánica. Y puede resumirse así:
“Si soy responsable de mis residuos creo un vínculo entre lo que como y lo que trasformo. Genero las condiciones con paciencia, no contamino, genero mi propia tierra fértil”.
[1] humabono es el término que usamos para referirnos al estiércol humano ya transformado en tierra fértil o abono.