SONORA Y EL MANEJO INTEGRADO DEL PAISAJE
julio 9, 2024Re-pensando la Sostenibilidad
julio 12, 2024Reseña del proyecto de titulación de Ana Rosa Gordillo Terrón. Generación 2022. Maestría en Proyectos Socioambientales de la Universidad del Medio Ambiente.
Contexto:
El “Proyecto Xona”, surge en 2021, como parte de Hagamos Composta, asociación que tiene como objetivo reducir la cantidad de residuos producidos en las ciudades a través de un servicio de recolección y transformación de residuos orgánicos.
En 2020 la población total de Xonacatlán fue de 43,035 habitantes, de los cuales 22% lo componen jóvenes entre 15 y 24 años (INEGI, 2020) que a través de las entrevistas e interacciones que hemos tenido con ellos, han demostrado una apatía generalizada ante los acontecimientos sociales y ambientales de su comunidad. Es importante fomentar la empatía hacia la naturaleza y generar una conexión emocional con ella para poder adoptar comportamientos sostenibles hacia el medio ambiente.
Propósito:
Desde sus inicios, el proyecto ha contado con el apoyo de un grupo de jóvenes residentes en el área donde se realiza la recolección y transformación de residuos orgánicos. Estos jóvenes, además de convertirse en amigos de la iniciativa, han pasado a ser parte fundamental del proyecto. Es por ello que se ha planteado el Proyecto Xona, cuyo objetivo es crear y fortalecer espacios para el desarrollo de habilidades socioemocionales y de liderazgo en los jóvenes de Xonacatlán. A través de una comunidad de reflexión, apoyo y acción, se busca abordar las problemáticas socioambientales de su entorno, con el fin de mejorar gradualmente las realidades sociales y ambientales de la localidad y, en consecuencia, la calidad de vida de sus habitantes.
Un enfoque integral para el desarrollo personal y social
Este acompañamiento se enfoca en tres ejes de acción:
- Autoconocimiento: Se incorporan actividades y procesos que permiten a los estudiantes explorar y comprender su propio ser, identidad, emociones, heridas, fortalezas, y sueños para que de esta forma puedan tener un discernimiento sólido y fundamentado en la formulación de sus proyectos de vida.
- Tejido social: Se fomenta la construcción de relaciones sólidas y participativas a través del encuentro, la reflexión, el diálogo y el cuidado mutuo. Se busca que los jóvenes aprendan a colaborar, comunicarse de manera efectiva y resolver problemas de forma conjunta, fortaleciendo así los vínculos con su comunidad. Buscamos que los jóvenes aprendan a colaborar, comunicarse efectivamente y resolver problemas de manera conjunta, a la vez que establecen vínculos sólidos con su comunidad.
- Sustentabilidad: Buscamos resignificar la relación que tienen los jóvenes con la naturaleza, a través de la sensibilización y comprensión de los problemas ambientales del mundo y específicamente de su comunidad.
Es crucial que la juventud reconozca la importancia de cuidar el medio ambiente y que asuma la responsabilidad de sus acciones y cómo estas pueden afectar de manera positiva o negativa a futuras generaciones
Un paisaje en transformación: De lo rural a lo urbano
El municipio de Xonacatlán ha experimentado una drástica transformación en las últimas décadas. Lo que antes era un territorio predominantemente rural, dedicado a la agricultura, la silvicultura y la ganadería, ha dado paso a un paisaje urbano dominado por los sectores de servicios e industrial.
Según el Plan de Desarrollo Municipal de Xonacatlán (2022-2024), hace apenas quince años, la zona agropecuaria ocupaba el 87.4% del territorio municipal, con un 58.4% dedicado a la agricultura, un 22.5% a los bosques y un 6.5% a los pastizales. El resto del territorio correspondía al área urbana.
Problema socioambiental:
Promueve la comprensión de las diversas realidades socioambientales y la aspiración del bien común. Impulsamos un liderazgo que no se centra en intereses propios, sino que encuentra sentido en el contexto y el trabajo colectivo. Este liderazgo busca la transformación socioambiental y el beneficio de las comunidades (Rincón, 2022)El programa busca generar una conciencia sobre la gravedad de la crisis cultural y ecológica que está viviendo el planeta a la vez que busca resignificar la relación de los jóvenes con la naturaleza a través del fortalecimiento y desarrollo de habilidades socioemocionales, de esta forma se incrementará el cuidado del patrimonio cultural a través del desarrollo de propuestas que mejoren las condiciones ambientales del territorio.
De acuerdo a Humberto Maturana (1990) “No hay acción humana sin una emoción que la funde como tal y la haga posible como acto”, lo que implica que las emociones no solo son reacciones pasajeras o estados de ánimo, sino fuerzas que dan forma a nuestras decisiones, comportamientos y acciones.
Al reconocer el papel fundamental de las emociones en la motivación de nuestras acciones podemos fomentar cambios positivos y duraderos hacía acciones más sostenibles.
Mapa sistémico de la Teoría de Cambio:
Hagamos Composta no se limita a operar únicamente en Xonacatlán; cuenta con más de 16 sedes en diversas ubicaciones como México, España, Costa Rica, Honduras y El Salvador.
Nuestro objetivo es sistematizar la experiencia obtenida en Xonacatlán y replicarla en los distintos terrenos donde operan las otras sedes. Esto se realizará adaptando el enfoque a los contextos y necesidades específicas de cada lugar, pero manteniendo el mismo objetivo fundamental: desarrollar habilidades en los jóvenes para que se sientan capaces de llevar a cabo proyectos autogestivos que beneficien a sus comunidades.
Para replicar este acompañamiento en los diversos territorios donde opera Hagamos Composta, es fundamental establecer un vínculo estrecho con los habitantes de cada comunidad. Idealmente, se debe realizar un “metadiagnóstico” inicial que nos permita obtener una comprensión más profunda y detallada del contexto.
Por otro lado, es importante investigar si existen otras iniciativas en el área que estén generando impacto y, de ser posible, colaborar con ellas para evitar duplicar esfuerzos y trabajar en equipo en el fortalecimiento de las acciones existentes.
Conclusiones:
Nuestro objetivo es que este acompañamiento evolucione hacia la autogestión, asegurando su sostenibilidad a largo plazo. Sin embargo, reconocemos la importancia de establecer primero unas bases sólidas, fomentando hábitos y compromisos firmes. Una vez logrado esto, podremos dar un paso atrás y permitir que los jóvenes tomen la iniciativa, asegurando que el impacto del curso continúe y se expanda.