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Usar un humedal como sistema de tratamiento de aguas residuales es uno de los múltiples sistemas que se pueden implementar para resolver problemas de saneamiento. En una clase magistral organizada por la Universidad del Medio Ambiente, José Manuel Vichis habla de su experiencia en el proyecto del Humedal en el IMSS, Amanalco, Valle de Bravo.
Actualmente, en la cuenca Amanalco-Valle de Bravo, con excepción de la planta de tratamiento El Arco, no se cuenta con ningún tipo de tratamiento de sus aguas residuales. Las plantas de tratamiento convencionales requieren de un alto costo en energía y operación. Por esa razón, el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura buscó alternativas y desarrolló una idea de proyecto. El objetivo del proyecto es tener un espacio funcional que demostrara a la sociedad y gobierno que se existen acciones sostenibles y viables.
El proyecto, financiado por la Comisión Nacional del Agua y diseñado por el IMTA, cuenta con la participación del IMSS, el gobierno municipal de Amanalco, el CCVBA y el CCMSS. Su objetivo es desarrollar un sistema de tratamiento de aguas residuales específicamente para el hospital IMSS en Amanalco.
Beneficios de un humedal
El humedal fue seleccionado por sus numerosos beneficios, que incluyen la capacidad de funcionar sin energía eléctrica, eliminando la necesidad de equipos costosos y reduciendo los impactos negativos asociados con las plantas de tratamiento convencionales. A diferencia de estos sistemas, los humedales no generan malos olores, lodos residuales ni ruidos, lo que los convierte en una solución sostenible y menos intrusiva.
Diseño del humedal
Un humedal es un espacio aislado y contenido de elementos bióticos y sustratos diseñado para remover o disminuir los contaminantes presentes en el agua residual, replicando los procesos que ocurren de manera natural en los ecosistemas semi acuáticos y acuáticos.
El humedal propuesto es un sistema combinado de tipo subsuperficial y superficial, de flujo totalmente horizontal y alternado con lagunas de maduración. Desplantado sobre una superficie de 740m2, el agua toma en recorrer el circuito del humedal 12.1 días. El humedal alberga un caudal de 15m3 de agua al día, es decir, 0.17 litros de agua por segundo.
Primero, en el inicio del circuito, las rejillas en el influente ayudan retener los sólidos suspendidos no orgánicos. Posteriormente el agua pasa por una serie de estaciones de carrizo lirio y tule. Esto es la base de los tratamientos por procesos naturales. En las superficies del medio filtrante y sobre las raíces se desarrollan capas de microorganismos, que son los responsables de biodegradar la materia orgánica contenida en el agua residual. Mediante el proceso de fotosíntesis, las especies vegetales proporcionan el oxígeno requerido por los microorganismos.
En el medio filtrante de los humedales eliminan los sólidos con mayor densidad que el agua (arenas, tierra y gravilla). Mediante procesos bioquímicos por los microorganismos, las plantas mineralizan (biodegradadas)las sustancias disueltas (materia orgánica y nutrientes “nitrógeno y fósforo”). Los microorganismos patógenos son reducidos en número por la disminución en la disponibilidad de alimento, por filtración, sedimentación, así como por incremento de PH por los rayos ultravioleta en las lagunas de maduración.
Mantenimiento
Al finalizar, periódicamente el agua tratada es monitoreada por estudios de laboratorio con la metodología Global Water Watch. Mediante su laboratorio certificado, el IMTA ha realizado dos análisis detallados en base a la NOM-001-SEMARNAT-1996. Los resultados de estos análisis fueron favorables, con excepción de los niveles de E.coli que salieron fuera de la norma.
Actualmente el CCMSS realiza jornadas de mantenimiento al humedal mediante un programa de manejo integral. Esto, debido a que el humedal requiere un mantenimiento periódico constante. Por esta razón José Manuel Vichis ha solicitado a estudiantes de la UMA a visitar el humedal y sumar esfuerzos para unirse a las jornadas.
Experiencia personal
Personalmente tuve la oportunidad de unirme a una jornada de limpieza del humedal. Participé en la tarea quitar el excedente de lirios en una de las estaciones del humedal y reducirlas hasta el 60% de su capacidad. El proceso de limpieza fue fácil de implementar. Se retiraban los lirios del humedal y se acarreaban en carretillas a otro lugar. Dentro de mi visita me llamó la atención la rapidez y la capacidad de crecimiento de las plantas en el humedal.
Tener esta experiencia me hizo valorar y dar importancia al seguimiento que lleva cualquier proyecto. Además de valorar el esfuerzo y el trabajo de muchas personas que creen en el proyecto y en sus beneficios para todos. Me parece que el humedal del IMSS es el ejemplo de la colaboración de múltiples organizaciones y personas en un propósito en común.
Así como este proyecto en la UMA puedes aprender a desarrollar sistemas alternativos que tengan un propósito socioambiental. !Conoce los programas educativos que la UMA ofrece y se parte de la comunidad UMA!
FIRMA
Escrito por Natalia Moguel (estudiante de la Maestría en Arquitectura, Diseño y Construcción Sustentable, generación 2022)
Las opiniones incluidas en este artículo son responsabilidad de quien las escribe, y no reflejan la postura, visión o posición de la Universidad del Medio Ambiente.